quarta-feira, 20 de agosto de 2008

Cuidados com o cavalo

Reglamento de estancias
Debe haber el más delicado y puntual esmero en que el que trabaje en un caballo no lo maltrate, y que lo mude antes de que se ponga pesado. No hay cosa más mala que rematar o cansar un caballo. De ello resultan las muertes y consiguiente menoscabo. El caballo cansado, si no muere queda ya lisiado, y a poco trabajo que haga, se enferma y se cansa, Esto mismo debe tenerse presente cuando se mande algún chasque, para hacerle mil encargos con el fin de que camine de modo que no se canse el caballo al trote y al galope, más trote que galope.
El Caballo por Juan Manuel de Rosas

Boleadeiras ou boleadoras

La boleadora fue la primera arma de guerra usada por los indígenas. El gaucho la adquirió en el siglo XVIII convirtiéndola en arma formidable y elemento útil para la caza y el trabajo.
Actualmente la boleadora es una reliquia que, si bien ya no se usa como arma de trabajo, el gaucho la sigue usando como adorno, cuando ensilla su caballo con pilchas de lujo.
http://www.madariagaxxi.com

terça-feira, 19 de agosto de 2008

Rastra

Adorno generalmente en chapa de plata, de forma muy a menudo circular, ovalada o acorazonada, calada o maciza, que suele llevar las iniciales de su dueño o la marca del estancieiro, como asi tambien el cincelado de una flor, caballo u otro motivo criollo.
Nunca he visto usar a los paisanos en el campo una rastra en forma de herradura de caballo como comunmente lo hacen cantores nacionales y actores disfrazados de gauchos, pues la herradura es un articulo que el paisano nunca se ha visto obligado a colocar a sus caballos y que solamente se usa en las ciudads o en lugares donde el suelo obliga a llevarlas, pero no en estas pampas.
El paisano lleva sujeta la rastra a los ojales de su cinto o tirador, por medio de patacones, monedas o botones de plata unidas a aquella por cadenas o chapones. Algunos gauchos usan grandes y pesadas rastras.
Vocabulario y refranero criollo. buenos aires 1945

Mangrulho ou mangrullo

Torre rústica construida generalmente con largos palos,troncos, etc., que se usaba en las estancias, boliches, rancherios y fortines, para vigilar el campo desde su elevacion, y dar cuenta de la proximidad o ataque de los indios.
Vocabulario y refranero criollo, buenoms aires 1945.

quinta-feira, 14 de agosto de 2008

La Negra y La Sole


Mercedes Sosa e Soledad Pastorutti duas das mais belas vozes da américa latina no festival de Cosquim 2008.

quarta-feira, 13 de agosto de 2008

Campo

El "campo" no es sólo una extensión infinita de tierra fértil y poblada de árboles y plantas. Para el hombre y la mujer, que en él habitan, adquiere una simbología extensa y particular.

El "campo" es tierra, madre, Pachamama, generadora de cuanta vida existe en ella y de cuanto fruto produzca. Es la Patria que desde tiempos pretéritos, sus herederos ancestrales han sabido defender sin temor a perder la vida.

Es también el trabajo, trajín del día que comienza antes del alba y culmina posterior al ocaso; es ganado y el pastoreo, y el alimento de la prole, en cada cosecha, donde el sudor diario crece como semilla en cada surco de la tierra.

El "campo" es devoción, la entrega religiosa, mezcla de sacro y mundano, que se manifiesta en cada Patronal. Además, es arte, del más, sano, del hombre o mujer que transforma con cada nueva creación en cuero, madera, lana, o cualquier elemento que la naturraleza le brinde. Creación con nombre propio.

El "campo" es para el gaucho el infaltable recreo, ese momento de distracción que su espíritu le exige para poder permanecer firme y cada vez más fortalecido ante una nueva adversidad, por eso rompe el silencio de la soledad o la compañía entonando según el tiempo y el ritmo, una triste o festiva copla; monta un "bagual" para lanzarse a jinetear, o prepara el lazo paciente y lo lanza hacia algún vacuno para pialarlo.

www.upcndigital.org/articulo

terça-feira, 12 de agosto de 2008

Palanqueada

Uno vez embozalado se lleva al potro al palenque, preferiblemente tirado por un caballo de cincho para suprimir todo posibilidad de fuga. De esta manera se evita lo formación de malos hábitos, ya que el yeguarizo posee uno gran memoria y si tiene éxito en el intento de fugarse, tratará de repetirlo.
Para atar el potro, se aconseja usar una cubierta de automóvil ensartada en el palenque, a la cual se sujeta el atador. De este modo la elasticidad de la cubierto amortiguará los tirones, disminuyendo el riesgo de que el animal quede resentido en el pescuezo.
Este trabajo no debe durar mucho tiempo, pues el excesivo tironeo provoca lesiones serias en la nuca, tren posterior, etc., y se corre el riesgo de obtener animales boleadores debido o una mala palenqueada. Es conveniente atar largo para dar al potro libertad de movimientos.
Luego se comienzo o soguearlo; poro ello, atando corto al potro, se lo manea y manosea con el propósito de habituarlo al contacto con el hombre o quien deberá respetar en adelante. Paro manearlo se aconseja utilizar la manea redonda, a la que luego se le puede agregar la manea corta para sujetarlo firmemente.
www.noroestebonaerense.com.ar